Confianza
Cuando confiamos plenamente en el ser humano este puede sacar lo mejor de sí mismo
Confiamos cuando hay aceptación plena, cuando no ponemos condiciones, cuando damos espacio a la singularidad de cada cual, cuando le dejamos que vaya a su ritmo, cuando respetamos su proceso, cuando damos espacio y tiempo a sus iniciativas, cuando acogemos el error como el gran aliado del aprendizaje.
Respeto
Sólo se respeta aquello que se conoce y valora
Si conocemos cómo se dan los procesos de crecimiento en los seres humanos, podremos acompañar y favorecer su sano desarrollo. Gran parte de nuestro trabajo consiste en observar y estudiar a los niños y ofrecerles apoyo como componentes únicos de un ecosistema al que todos pertenecemos.
Amor
El amor es la base de la vida; sin amor, la vida no florece.
Cada día, nuestro objetivo es crear un espacio educativo en donde el amor sea la base de las relaciones, un espacio en donde los niños se sientan plenamente reconocidos y aceptados en su singularidad, en donde vivan relaciones de respeto entre los adultos y los niños.
En Alavida propiciamos que los niños aprendan a amarse, para que luego puedan amar a los que les rodean, a su entorno y a la naturaleza.
Diversidad
Alavida es como un bosque con diversidad de especies. Y no podemos esperar lo mismo de una margarita que de un roble
Creemos que cada ser humano es único e irrepetible, que todos los niños tienen algo que aportar y que recibir.
Por ello no ofrecemos a todos lo mismo, ni esperamos iguales resultados de ellos ni en tiempo ni en forma.
Este respeto por la diversidad requiere estar siempre atentos al desarrollo individual de los niños y constatar que ellos siguen su propio proceso de aprendizaje.
Libertad y Límites
Los límites dan espacio y sentido a la libertad y la libertad da sentido y espacio a nuestra vida
Solo desde la libertad podemos llegar a sentirnos dueños de nuestra vida y asumir nuestras decisiones con sus responsabilidades y sus consecuencias de forma coherente.
Además, en ambientes de libertad surgen de forma natural la curiosidad, el interés y la motivación, elementos esenciales en el aprendizaje placentero y significativo.
El camino de la libertad está custodiado por los límites. Para que todos podamos gozar de un ambiente relajado y seguro, los niños y los adultos necesitamos de normas y límites claros, tan firmes como respetuosos. Aceptamos y reconocemos las emociones y las dificultades que los niños puedan sentir al encontrarse con límites, y empatizamos con ellas, pero no les permitimos que se hagan daño a sí mismos ni a nadie más.
Autonomía
“Ayúdame a hacerlo por mí mismo”
Maria Montessori
Permitir que el niño pueda desarrollar todo su potencial por sí mismo es clave para que confíe en sus capacidades.
Además genera los mecanismos necesarios para enfrentarse a las dificultades y las frustraciones, disfruta de sus logros y construye una autoestima positiva.
De hecho, “cualquier ayuda innecesaria es un obstáculo para el desarrollo”, como también decía Maria Montessori.
Confianza
Cuando confiamos plenamente en el ser humano este puede sacar lo mejor
de sí mismo
Cada día, nuestro objetivo es crear un espacio educativo en donde el amor sea la base de las relaciones, un espacio en donde los niños se sientan plenamente reconocidos y aceptados en su singularidad, en donde vivan relaciones de respeto entre los adultos y los niños.
En Alavida propiciamos que los niños aprendan a amarse, para que luego puedan amar a los que les rodean, a su entorno y a la naturaleza.
Respeto
Sólo se respeta aquello que se conoce y valora
Si conocemos cómo se dan los procesos de crecimiento en los seres humanos, podremos acompañar y favorecer su sano desarrollo.
Gran parte de nuestro trabajo consiste en observar y estudiar a los niños y ofrecerles apoyo como componentes únicos de un ecosistema al que todos pertenecemos.
Amor
El amor es la base de la vida; sin amor, la vida no florece
Cada día, nuestro objetivo es crear un espacio educativo en donde el amor sea la base de las relaciones, un espacio en donde los niños se sientan plenamente reconocidos y aceptados en su singularidad, en donde vivan relaciones de respeto entre los adultos y los niños.
En Alavida propiciamos que los niños aprendan a amarse, para que luego puedan amar a los que les rodean, a su entorno y a la naturaleza.
Diversidad
Alavida es como un bosque con diversidad de especies. Y no podemos esperar lo mismo de una margarita que de un roble
Creemos que cada ser humano es único e irrepetible, que todos los niños tienen algo que aportar y que recibir.
Por ello no ofrecemos a todos lo mismo, ni esperamos iguales resultados de ellos ni en tiempo ni en forma.
Este respeto por la diversidad requiere estar siempre atentos al desarrollo individual de los niños y constatar que ellos siguen su propio proceso de aprendizaje.
Libertad y límites
Los límites dan espacio y sentido a la libertad y la libertad da sentido y espacio a nuestra vida
Solo desde la libertad podemos llegar a sentirnos dueños de nuestra vida y asumir nuestras decisiones con sus responsabilidades y sus consecuencias de forma coherente.
Creemos que cada ser humano es único e irrepetible, que todos los niños tienen algo que aportar y que recibir. Por ello no ofrecemos a todos lo mismo, ni esperamos iguales resultados de ellos ni en tiempo ni en forma.
Este respeto por la diversidad requiere estar siempre atentos al desarrollo individual de los niños y constatar que ellos siguen su propio proceso de aprendizaje
Autonomía
«Ayúdame a hacerlo por mí mismo»
María Montessori
Permitir que el niño pueda desarrollar todo su potencial por sí mismo es clave para que confíe en sus capacidades.
Además genera los mecanismos necesarios para enfrentarse a las dificultades y las frustraciones, disfruta de sus logros y construye una autoestima positiva.
De hecho, “cualquier ayuda innecesaria es un obstáculo para el desarrollo”, como también decía Maria Montessori.
Cooperación
En ambientes relajados y respetuosos la cooperación surge en los niños de forma natural
En Alavida no es necesario pedir a los niños y las niñas que cooperen; la cooperación surge cuando en sus actividades se necesitan mutuamente o quieren hacer algo juntos.
Lo que sí hacemos es no enfrentarles entre sí ni compararles, dos de los grandes enemigos de la cooperación natural y espontánea de los seres sociales. Así mismo, cuando entre los adultos logramos cooperar, comprobamos que llegamos mucho más lejos.
Alavida ha sido posible por el trabajo en equipo de muchas personas.
Juego y alegría
El juego es un mecanismo natural de desarrollo y aprendizaje. A través de él vamos comprendiendo el mundo e interiorizándolo
Después de haber observado durante más de 18 años a los niños en su trabajo y en su juego, estamos convencidos de que el aprendizaje profundo se da en un entorno de alegría, disfrute y creatividad.
Esto se verifica especialmente cuando hay juego libre y trabajo autónomo desde sus propios intereses y cuando se sienten aceptados, respetados y seguros. Como demuestran los neurocientíficos, el aprendizaje depende del bienestar emocional, y la escuela debe garantizarlo.
El placer de aprender
Los aprendizajes están asociados con emociones, y cada vez que usamos unos conocimientos reproducimos los estados de ánimo con los que se adquirieron
Sabemos que los aprendizajes más fecundos suceden cuando los niños disfrutan descubriendo fenómenos, interrelacionando datos, sacando conclusiones, creando y representando escenarios, investigando posibilidades, planteando hipótesis y verificándolas.
Además, al estar los conocimientos asociados a emociones, cuando aprendemos algo con alegría lo usaremos con alegría, e igualmente si aprendemos con miedo, por ejemplo las matemáticas, cuando las necesitemos nos invadirá el temor.
Interdependencia
Pertenecemos a un mundo que queremos cuidar y al que agradecemos que nos cuide y acoja
En Alavida ofrecemos espacios en donde las próximas generaciones puedan tener conciencia de pertenecer a un sistema holístico y entrelazado, interdependiente y global.
Queremos transmitir a los niños que formamos parte de un mundo en el que nuestras acciones tienen repercusiones y consecuencias, y que ser conscientes de ellas nos permite asumir mejor nuestras responsabilidades.
Comunicación
El encuentro se da en espacios de comunicación profunda y respetuosa. Para poder acompañar tenemos que habernos encontrado
En Alavida tenemos el compromiso, con los niños y con las familias, de mantener los canales de comunicación abiertos en todo momento.
Nos comprometemos a hablar de las dificultades que surgen entre nosotros y de propiciar un diálogo respetuoso.
Todos los miembros del equipo cuentan con formación en Comunicación no Violenta y en gestión de conflictos.
Coherencia
En Alavida los valores se viven y entonces empiezan a formar parte de ti
El alumnado no aprende los valores por lo que le decimos, aprende de lo que hacemos y permitimos que hagan.
Vivir relaciones de respeto y cuidado mutuo, cooperación, responsabilidad, libertad y confianza es parte esencial de Alavida.
Cuestionamiento y reflexión
Estamos de camino, no hay nada incuestionable en nuestra propuesta
Constantemente estamos revisando nuestro trabajo, nuestras ideas previas sobre los niños, nuestras teorías.
Aunque tenemos unos planteamientos y unos principios sobre los que se construye nuestro trabajo pedagógico, estos están en constante revisión.
Sabemos si nuestro trabajo es bueno cuando miramos a los niños y los vemos activos, creativos, concentrados, entregados con entusiasmo al trabajo, felices, aprendiendo constantemente cosas nuevas, con una autoestima alta, seguros de sí mismos, respetuosos, atentos a sus necesidades y a la de los demás, autónomos y solidarios.
Equilibrio
En el equilibrio está la virtud
La experiencia nos ha enseñado que en el equilibrio está la virtud. Queremos que los contenidos sean flexibles, pero tenemos en cuenta el currículum. Escuchamos la opinión de las familias sin olvidar nuestras propias certezas.
Damos importancia a los contenidos conceptuales, pero no descuidamos los actitudinales, y seguimos los intereses que surgen de los niños a la vez que generamos nuevas iniciativas.