de 18 a 99 años
Formación
Cuando en el 2002 empezamos nuestro propio espacio educativo, teníamos la certeza de que otra infancia era posible y la seguridad de que los niños educados en un entorno de confianza y respeto crecerían más felices, con más autoestima, más confianza en ellos mismos, más autónomos y creativos, más respetuosos y empáticos; confiábamos plenamente en que la curiosidad y el interés se mantendrían a lo largo de la infancia y la niñez, y en que desarrollarían todo su potencial intelectual de forma armónica y significativa. En eso creíamos, y sabíamos que en otros lugares como el Pesta, en Quito, lo habían logrado. Con los años y según los niños de Alavida fueron creciendo pudimos ver los maravillosos efectos que tenía este tipo de educación en ellos. Según fueron incorporándose a otros centros escolares, los profesores que los acogían, y sus entornos en general, nos lo confirmaron con creces.
De 18 a 99 años
Formación
Cuando en el 2002 empezamos nuestro propio espacio educativo, teníamos la certeza de que otra infancia era posible y la seguridad de que los niños educados en un entorno de confianza y respeto crecerían más felices, con más autoestima, más confianza en ellos mismos, más autónomos y creativos, más respetuosos y empáticos; confiábamos plenamente en que la curiosidad y el interés se mantendrían a lo largo de la infancia y la niñez, y en que desarrollarían todo su potencial intelectual de forma armónica y significativa. En eso creíamos, y sabíamos que en otros lugares como el Pesta, en Quito, lo habían logrado. Con los años y según los niños de Alavida fueron creciendo pudimos ver los maravillosos efectos que tenía este tipo de educación en ellos. Según fueron incorporándose a otros centros escolares, los profesores que los acogían, y sus entornos en general, nos lo confirmaron con creces.